“Mi bebé no puede hacer popó y puja mucho”: muchas mamás se preocupan al decirlo. Esto podría ser uno de los principales signos de la disquecia del lactante. Consulta al pediatra y descubre si es posible tratarla.
¿Qué es la disquecia del lactante y qué la causa?
Es una condición en la que el bebé presenta dificultades para hacer popó. Se debe a la falta de coordinación y control de los esfínteres, músculos que participan en el proceso de la defecación.
En otras palabras, la disquecia ocurre cuando al sistema de evacuación del pequeñito le falta madurar para expulsar las heces. En casi todos los bebés este problema suele suscitarse durante sus primeros seis meses de vida.
¿Cuáles son sus síntomas?
Normalmente, los signos aparecen entre diez o veinte minutos antes de evacuar. Los más comunes son:
- • Llanto.
- • Gritos.
- • Nervios.
- • Esfuerzo intenso.
- • Enrojecimiento facial.
- • En algunos casos, la coloración de la piel se torna azulada.
Estas señales pueden desaparecer naturalmente después de tres o cuatro semanas.
¿Existe un tratamiento para la disquecia del lactante?
En realidad, este trastorno suele resolverse con el tiempo, por lo que no necesita tratamiento. Los especialistas no recomiendan el uso de laxantes ni llevar a cabo maniobras que faciliten la expulsión de popó. Las cremas o los supositorios también están contraindicados.
¡Ojo! Un médico debe asegurarse de que el pequeño no tiene otros problemas de salud para que el diagnóstico de disquecia infantil sea preciso.
¿Las molestias por disquecia pueden aliviarse?
Esta condición es bastante incómoda para el bebé. Por ello, los expertos aconsejan a los padres seguir algunos cuidados para disminuir las molestias de sus hijos:
- • Ofrecerles pecho: de esta manera, los bebés se relajarán, lo que a su vez puede ayudar a abrir el esfínter anal.
- • Doblar sus piernas sobre su pecho: esta posición genera presión sobre el esfínter anal. Esto podría facilitar la salida de las heces y los gases.
¿Cuál es la diferencia entre disquecia y estreñimiento?
Ambas condiciones están relacionadas con las dificultades en las evacuaciones intestinales del pequeño. Sin embargo, son distintas.
En la disquecia, el bebé experimenta dificultad para expulsar las heces, aunque éstas sean blandas. Por otro lado, en el estreñimiento, la popó es dura, lo que ocasiona que el pequeño no pueda expulsarlas.
Es cuestión de tiempo
La inmadurez del esfínter anal no es una enfermedad. Los padres deben saberlo, pues muchas veces recurren a prácticas poco convenientes para el bebé por falta de información.
La disquecia del lactante es muy habitual entre los recién nacidos. Verás que, con el paso del tiempo, el sistema digestivo de tu pequeño madurará. Si no es así, consulta al médico para conocer la razón y prevenir complicaciones.
