Algunas mamás acostumbran darles a sus bebés chupones de miel. En muchos casos lo hacen para calmar su llanto, ayudarles a conciliar el sueño o reducir su estrés. Aunque comúnmente se cree que éstos forman parte del desarrollo del bebé, su uso ha sido muy debatido. Conoce la razón.

¿Es bueno darle chupones de miel a mi bebé?
La Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA) recomienda no ofrecer al bebé un chupón con miel. La razón es que éste puede poner en riesgo la salud del pequeño al exponerlo a enfermedades como el botulismo.
El botulismo es un trastorno causado por la liberación de toxinas producidas por la bacteria Clostridium botulinum en el intestino del bebé. Según su gravedad, puede ocasionar desde síntomas leves hasta parálisis, insuficiencia respiratoria o la muerte.
La miel puede contener esporas de la bacteria que causa esta enfermedad. De hecho, este producto es considerado una potencial fuente de infección. Por eso, su consumo no se recomienda en bebés menores de 12 meses.
¡Presta atención! A pesar de que esta enfermedad afecta mayormente a bebés menores de un año, los niños mayores también pueden padecerla. Esto se debe a alteraciones en su flora intestinal.
¿Y qué hay de sumergir los chupones en miel?
De igual forma, hay personas que creen que sumergir chupones en miel es inofensivo. Sin embargo, los expertos señalan que esta práctica también se relaciona con el riesgo de desarrollar botulismo infantil o caries.
Podrías hacer esto
Ahora que ya conoces las consecuencias de darle a tu bebé chupones con miel, acude al pediatra. Así podrás conocer las alternativas a este producto. También conocerás qué factores tomar en cuenta para elegir el chupón adecuado para tu bebé.
