Algunas personas consideran que el jabón de carbón activado es ideal para deshacerse de las toxinas de la piel. Por ello, hay quienes lo usan como un producto para tratar el acné. ¿Qué propiedades tiene en realidad? ¡Descúbrelo!

¿Qué es el carbón activado?
Es un elemento que se obtiene del bambú, cortezas de árboles o cáscara de coco. Al exponerse a temperaturas muy altas, estos materiales se queman hasta producir polvo de carbón. Sus propiedades y efectos dependen de la materia prima con la que se produjo.
Este compuesto es utilizado para eliminar contaminantes y bacterias y como auxiliar en el tratamiento de intoxicaciones. Hoy en día es un ingrediente muy popular dentro de la industria cosmética por sus aplicaciones.
¿Para qué sirve el jabón de carbón activado?
Gracias a los efectos de este compuesto, los jabones que lo contienen tienen diversos usos:
1. Limpieza de la piel
El carbón activado es conocido por su efecto limpiador. Gracias a su alta capacidad de adsorción (¡ojo, no absorción!), este se une a las impurezas para deshacerse de ellas.
2. Auxiliar en el tratamiento del acné
Usar un jabón hecho con este ingrediente contribuye a eliminar el exceso de grasa en la piel. Ya que ayuda a limpiar los poros obstruidos con grasa y suciedad, es adecuado para pieles con tendencia al acné.
3. Aliado contra el envejecimiento
¿Sabías que el jabón de carbón activado contiene antioxidantes? Éstos pueden disminuir la probabilidad de presentar líneas de expresión a temprana edad.
Y por si fuera poco…
¡El jabón de carbón activado es apto para todo tipo de pieles! Sin embargo, hay que tener en cuenta que cada una requiere cuidados específicos. Recuerda que, antes de usar cualquier producto nuevo en tu rostro o cuerpo, debes consultar al dermatólogo.
