Nuestra piel tiene glándulas sebáceas que son las que nos aportan nutrición y mantienen la hidratación. Sin embargo, la piel de nuestros labios no cuenta con ellas y siempre necesitaremos prestarles más atención, sobre todo en invierno.
La solución es utilizar un bálsamo labial que evite la deshidratación y, por otra parte, que aporte nutrición y sea capaz de reparar la piel dañada.
Aquí te mostraremos cómo elaborar un bálsamo labial
Los ingredientes básicos que necesitas para poder elaborarlo son los siguientes:
Aceite de Coco
Contiene ácidos grasos de cadena media que equilibran el sebo y el pH natural de la piel de los labios. Es un aceite muy emoliente, nutritivo y suavizante, tarda un poco en absorberse y esto hace que proteja nuestros labios de la deshidratación. Está indicado para piel muy seca y con grietas, por eso es imprescindible en un bálsamo labial.
Manteca de Karité
Es rica en vitamina A y E y esto hace que tenga propiedades antioxidantes y regeneradoras. Es muy hidratante y nutritiva. Protege la piel de la deshidratación y la calma si está inflamada. Por eso está indicada para la piel dañada, muy seca y sensible. La pueden utilizar pieles delicadas como las de los niños.
Cera de Abeja Virgen
En los bálsamos labiales se utilizan las ceras para dar una textura sólida. Pero además la cera de abeja tiene propiedades protectoras. Crea una fina película sobre la piel que evita la deshidratación y le aporta suavidad.
Si quieres dar un aroma natural a tus bálsamos labiales puedes añadir un aceite esencial. Te proponemos el aceite esencial de lavanda, ya que es un poderoso calmante que también favorece la regeneración celular de la piel, por lo que es ideal para combatir el agrietamiento y cualquier tipo de herida.

Modo de elaboración
- • Limpia y desinfecta los utensilios que vayas a utilizar.
- • Pon en una jarra de cristal el aceite de coco y la cera de abeja, calienta a baño maría.
- • Una vez que se ha disuelto la cera de abeja, apaga el fuego.
- • Agrega la manteca de karité y deja que se deshaga con el calor.
- • Cuando se disuelva la manteca de karité, puedes agregar un aceite esencial.
- • Envasa sin dejar que se enfríe la mezcla.
- • oYa en el envase puedes dejar enfriar a la intemperie o en el refrigerador para utilizarlo posteriormente.

Hacer un bálsamo labial casero puede ser una actividad divertida para ti y tu familia, sin embargo, también puedes encontrar en el mercado bálsamos labiales elaborados con éstos y otros ingredientes 100% de insumos de origen natural, listos para usarse.
Puedes tener siempre a la mano, un bálsamo labial, así, en cualquier momento que lo necesites, podrás utilizarlo y mantener unos labios hidratados y saludables.