
Enseguida encontrarás más tips sobre cómo cuidar un tatuaje recién hecho. Antes vamos a explicarte por qué debes proteger tu body art.
¿Por qué son importantes los cuidados de los tatuajes?
Su objetivo es prevenir infecciones. En sí, un tatuaje es una herida abierta en la que pueden entrar bacterias y gérmenes. Por eso debes lavarlo con un jabón antibacterial o bactericida, sin perfume ni alcohol.
Si además tienes otros cuidados después de que el tatuaje cicatrice, evitarás que empeore su aspecto con el paso de los años. En este sentido, los principales problemas a tratar son la pérdida de color y nitidez.
Más consejos sobre cómo cuidar un tatuaje recién hecho
¿Es el primero que te haces? Estos tips contribuyen a mantener una piel sana:
- • No te metas en la alberca ni te bañes con agua muy caliente, al menos hasta que cicatrice el tatuaje.
- • Ponte ropa suave y holgada para que no roce tu piel dañada.
- • ¡No te quites la costra!; ésta tiene que caerse por sí sola. Las costras están conectadas con las capas de la piel donde todavía no se ha secado la tinta.
- • Evita rascarte porque podrían quedarte cicatrices.
¿Qué cuidados debes tener con el paso del tiempo?
Una vez que tengas tinta en la piel, tu estilo de vida deberá cambiar. En primer lugar, evita exponer la piel tatuada al sol durante los primeros meses porque podrías sufrir quemaduras.
Tampoco uses camas solares ya que pueden desteñir los tatuajes. Cuando termine el proceso de cicatrización, mantén la zona hidratada con emolientes1 por lo menos durante un mes y usa protector solar.
Recuérdalo: un tatuaje te acompañará toda la vida
Ahora que sabes cómo cuidar un tatuaje recién hecho, consulta al dermatólogo si tienes enrojecimiento, inflamación, dolor o sientes calor. Estos síntomas indican una infección que sólo el especialista debe tratar.

1 Cremas que favorecen la humedad en la piel.