Para muchos, no hay nada como pasar un día soleado en un parque o el jardín de la casa. Sin embargo, para otros podría ser motivo de malestar por su alergia estacional. Si quieres saber por qué ocurre esto, necesitas conocer qué es esta alergia y qué la provoca.
¿Qué es la alergia estacional?
La alergia estacional anteriormente era conocida como fiebre del heno, y es de las alergias más comunes. Como su nombre lo dice, aparece en estaciones como la primavera, verano u otoño. Coincide con el momento en el que árboles, flores o hierbas inician su temporada de polinización.
¿Cuáles son los síntomas de alergia estacional?
Los síntomas habituales de la alergia estacional suelen ser los que afectan a la membrana y mucosa nasales, así como a los ojos:
- • Rinitis alérgica: es la manifestación más frecuente; causa picazón, rinorrea y estornudos.
- • Conjuntivitis alérgica: la alergia estacional también se caracteriza por la presencia de síntomas oculares. Éste en particular provoca picazón y ojos llorosos.
- • Rinoconjuntivitis: es la presencia de rinitis y conjuntivitis en conjunto. Sus molestias más notables son picor de nariz, rinorrea, estornudos y secreción nasal.
- • Asma bronquial: 80% de personas asmáticas padecen esta enfermedad debido a las alergias estacionales.
- • Congestión nasal.
- • Tos seca.
- • Picazón en garganta.
¿Qué la causa?
No es raro que, al presentar alguno de los síntomas descritos, haya quien piense que está desarrollando una infección respiratoria. Sin embargo, el factor para distinguir que podría tratarse de una alergia estacional es la presencia de polen en el ambiente.
Aunque todo depende del lugar, la mayoría de los casos de alergia se deben al polen de plantas. Es más, se puede padecer sin estar cerca de éste. La razón es que el aire transporta el polen fácilmente y puede hacerlo llegar a lugares lejanos.
Ahora, ¿cómo saber que hay polen en el ambiente? Una forma es identificar qué plantas lo producen en cada estación del año.
Primavera
Árboles como el abedul, roble, olmo, olivo y fresno
Verano
Gramíneas y malezas como el cardo
Otoño
Arbustos como la ambrosía
Esporas de moho
Diversas hierbas
¿Qué son los antihistamínicos y cómo funcionan?
Los antihistamínicos son medicamentos destinados al alivio y tratamiento de los síntomas producidos por las alergias. Una alergia es una reacción por parte del sistema inmunológico hacia sustancias llamadas alérgenos. Como ya sabes, uno de los alérgenos más comunes es el polen.
Cuando el organismo detecta un alérgeno, el sistema inmunitario produce anticuerpos que lo identifican como dañino. Además, se libera histamina, una sustancia química que está presente en algunas de células y que provoca los síntomas de alergia.
Los medicamentos antihistamínicos, como la loratadina y fenilefrina, tienen la función de bloquear el efecto de la histamina y, de esta forma, evitar los síntomas que produce. Existen dos tipos de antihistamínicos: los de primera y segunda generación. La diferencia entre éstos se basa en su efecto sobre los receptores de la histamina.
Los antihistamínicos de primera generación actúan sobre varios receptores, lo que provoca diversos efectos secundarios. Uno de los más conocidos es la somnolencia. En cambio, los de segunda generación actúan sobre un receptor llamado H1, lo que elimina la somnolencia como efecto secundario. Por tal razón, dichos antihistamínicos suelen tomarse una vez al día.
Hay otros cuidados para la alergia estacional
Los síntomas pueden dificultar el desarrollo de las tareas diarias. Por eso, es importante conocer diferentes maneras de evitarlos o tratarlos, además del medicamento para la alergia estacional:
- • En la medida de lo posible, evitar salir de casa los días muy secos y con viento. Los días siguientes a la lluvia es el momento ideal para realizar actividades al aire libre.
- • Evitar hacer actividades de jardinería.
- • Cambiarse la ropa al llegar a casa, pues las prendas pueden llenarse de polen del ambiente.
- • Ducharse para eliminar cualquier rastro de polen que quede en la piel o el cabello.
- • Utilizar cubrebocas si se experimentan síntomas fuertes y es necesario realizar actividades al aire libre.
Que salir no represente un problema
Ahora sabes que ciertos síntomas respiratorios y oculares podrían deberse a una alergia estacional y no a infecciones. Si tú crees tenerla, consulta al médico antes de exponerte al ambiente o de recurrir a un tratamiento con medicamentos. El especialista te dirá qué cuidados son adecuados en tu caso.
